René Preval es de momento el presidente de Haití, pero para el año que viene se tendrían que celebrar elecciones, algo en lo que ya ha pensado el actual presidente de Haití, debido a que ha solicitado una prolongación de su mandato durante algunos meses más, para poder ofrecer una estabilidad en un país que ahora necesita poder afrontar la grave situación. La oposición ha rechazado la demanda de Preval, al considerar que el presidente está mucho más pendiente de su continuidad, en vez de preocuparse de atender a los haitianos.

De seguro que la gran mayoría de haitianos lo que pretende es poder sobrevivir, conseguir alimentos con los que vivir cada día y conseguir una vivienda digna, pero no tienen preocupación acerca de la continuidad de Preval al frente de Haití, sobre todo cuando hay otros muchos asuntos más importantes que unas elecciones en 2011, que es la fecha en la que en teoría se tendrían que celebrar, a pesar de que las condiciones no sean las más idóneas para unas elecciones en 2011.

Lo más justo sería seguir con el plan establecido y celebrar las elecciones, algo que Preval no comparte, porque lo que pretende es seguir durante algún tiempo más en el poder y unas elecciones no le vienen muy bien para su continuidad. Los líderes políticos demuestran una vez más estar mucho más preocupados acerca de su futuro político que del resto de la sociedad, como se puede ver en Haití o en España, donde también ocurre algo similar, salvando las distancias.

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