Port-de-Paix, Saint-Marc y Gonaïves
Los comienzos de la campaña no fueron felices para Toussaint.
Prontamente las promesas francesas fueron desenmascaradas al llegar noticias de la reinstauración de la esclavitud en otras colonias como Guadalupe y con la captura mediante engaños de Louverture el 7 de junio, quien se había retirado a una hacienda, y su envío a Francia (Fort de Joug) dónde muere encarcelado bajo duras condiciones.
Este intento de privar a los haitianos de su líder resultó en un gran fracaso porque los militares haitianos, avezados en las luchas contra ingleses y españoles, intuyeron que seguirían la misma suerte y se rebelaron.
Haití sufre un largo período de aislamiento internacional promovido, fundamentalmente, por las potencias europeas y los Estados Unidos que no admitían la existencia de una nación gobernada por ex-esclavos lo que implicaba una amenaza para sus propios sistemas esclavistas.
La Guerra de la Independencia
La política de sangre inaugurada por Leclerc hizo ver a los oficiales de color que no habia seguridad para ellos junto a los franceses. Christophe y Dessalines no tardaron en unirseles.
Mientras tanto, Leclerc murió de fiebre amarilla y tomó el mando el general Rochambeau, cuya tiranía enajenó a Francia las ultimas simpatías de los haitianos.
Pétion, reconoció a Dessalines general en jefe de los rebeldes (con motivo a la conferencia secreta de Arcahaie), y este hecho hizo que la mayoría de los jefes de banda se agruparan alrrededor del ultimo.
La lucha se generalizó contra el ejército cada vez más reducido de Rochambeau, y luego de una serie de campañas (Jérémie, Jacmel, Saint-Marc, Fort-Liberté y Anse-à-Veau), el 11 de octubre, Port-au-Prince capituló y el 17 Geffrard entro en Les Cayes.
Comprendiendo que un sitio en regla era preferible a una ofensiva, empezo el 18 de noviembre a bombardear los fuerte de Breda y de Charrier.