Haití no pasa por sus mejores momentos, debido a que la palabra fraude se puede asociar con las elecciones del pasado mes de noviembre, por lo que los haitianos no están conformes con lo que ha sucedido, ya que votar por un candidato diferente no ha tenido efecto alguno. No deja de ser curioso que ahora Estados Unidos mire hacia otro lado y no diga nada sobre estas extrañas elecciones, cuyo resultado no es del todo real y que deja mucho que desear.

Es una pena que la corrupción siga siendo habitual en Haití y que los haitianos no tengan ningún poder para poder elegir a un buen presidente que se interese verdaderamente por ellos y por el país, un país que necesita a un presidente elegido por el pueblo y no uno impuesto, algo que parece que ha sucedido en esta ocasión. Los haitianos no tienen nada que perder, ya que en muchos casos apenas tienen alimentos y no tienen una vivienda en la que poder vivir, por lo que seguirán protestando hasta las últimas consecuencias.

Nuevamente Haití sigue en pie de guerra por todo lo que sucede desde el gobierno y los haitianos no son personas conformistas, por lo que no quieren que un gobierno que no han elegido pueda gobernar el país durante los próximos años. No parece que los haitianos se cansen de protestar ante la falta de ética del nuevo presidente, ya que los resultados de las elecciones no se corresponde con el sentir de los haitianos y con lo que votaron.

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